Es un edificio construido básicamente desde
el último tercio del siglo XII (alrededor de 1170), bajo el reinado de Fernando
II de León, hasta bien entrado el XIII.
Como consecuencia de tan largo periodo se aprecian
diferentes maneras de enfocar la construcción, que se realizó en dos fases sucesivas por talleres bien
distintos.
Un primer maestro, empleando como material la piedra caliza
blanquecina, fue el creador de la magnífica cabecera, la zona inferior de los muros exteriores y la portada
de la fachada norte, usando un lenguaje
románico evolucionado.
El segundo maestro, que finaliza la construcción, emplea
piedra arenisca de color más rojizo. Pertenece al Patrimonio Histórico
Nacional.
La planta
La planta es de cruz latina, con tres naves de tres
tramos con bóvedas de horno en la cabecera, de cañón en el crucero y nervadas
en el centro, más ancha la central que las laterales. El transepto es ligeramente resaltado en planta y tiene la
misma anchura que la nave central, por lo que el crucero es exactamente
cuadrado.
Cabecera
La
monumental cabecera está formada por tres ábsides, más alto y profundo el
central, al modo convencional. Los ábsides laterales son muy sobrios, pues sus
muros son completamente lisos, menos por el ventanal central y una imposta
alineada con sus alféizares.
Hay que destacar que el ábside central tiene bastante menos
altura que el presbiterio, lo que permite la apertura de un rosetón en su muro
de cierre oriental.
Las portadas
La Colegiata de Toro tiene tres portadas medievales
originales, que no se abren en los hastiales del transepto, sino en el centro
de las naves laterales. La más bella es la portada occidental
Puerta norte
Es la que se utiliza para acceder al templo y es un elegante ejemplar, muy restaurado en sus partes inferiores en
1933. Muestra la particularidad de que las columnas se agrupan de tres en tres
con ábaco común.
Puerta sur
La puerta meridional es la más sencilla de las tres con que
cuenta la colegiata. Encima se abrió un pequeño óculo cuya decoración
geométrica y vegetal de las roscas enlaza con el ornato exterior del cimborrio.
La portada occidental o de La Majestad
También
llamada Pórtico de la Majestad. Aunque es una de las más afamadas puertas de la
arquitectura gótica española, si bien la parte baja se comenzó a principios de
siglo.
La
iconografía de la puerta es doble. Por un lado nos remite al clásico motivo de
la Dormición y Coronación de la Virgen, como motivo principal, pero de manera
secundaria también lo hace del Juicio Final, con escenas de enorme expresividad
en relación a los tormentos de los condenados que aparecen en la parte derecha
de la arquivolta exterior.
Siendo
importantes las esculturas, lo es más su policromía, ya que es la original. Fue descubierta en los trabajos de restauración que se llevaron a cabo en
este elemento gótico entre los años 1980 y 1990.
El Cimborrio
Sin
duda, el origen del cimborrio de la colegiata de Toro hay que buscarlo en la
catedral de Salamanca que a su vez parte de la catedral zamorana. En efecto,
estos tres forman el grupo llamado "Los Cimborrios del Duero", al que
hay que añadir un cuarto, llamada Torre del Melón en la antigua sala capitular
de la catedral vieja de Plasencia.
Está
claro que el cimborrio es un elemento de raigambre paleocristiana y bizantina
que llega al mundo románico por el contacto entre la Italia bizantina y el
románico lombardo originario del norte de Italia.
El interior
En el interior también se aprecian las distintas
etapas por las que pasó su construcción: el primer arquitecto establece un
planteamiento de pilares cruciformes con columnas en sus caras y también en los
codillos y que estarían proyectados para bóvedas de crucería. En cambio, el
segundo, más anticuado y apegado a lo románico, abovedará con medio cañón sobre arcos fajones la nave central y la nave
del transepto.
Por
su parte, las naves laterales se abovedan con crucería de ocho nervios, menos
los primeros tramos que lo hacen con bóveda de aljibe.
Los arcos torales del crucero se prolongan
verticalmente mediante unas anómalas pechinas y por encima se alza la linterna
del cimborrio con dos pisos de ventanales y bóveda de ladrillo.
En cuanto la cabecera, los ábsides laterales llevan
bóvedas de medio cañón puro en los presbiterios y bóveda de horno en los
ábsides. En el central, el presbiterio tiene bóveda de cañón apuntado.
Sacristía





Muy completa la descripción del templo. Una clase de historia del arte del viejo bachillerato, cuando estos temas tenían su importancia. Asimismo un acierto los dos vídeos. Felicidades al/los artistas responsables
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